¿Qué es el tiroides?
El tiroides es una glándula situada en la región anterior del cuello. Tiene forma de mariposa con dos lóbulos, derecho e izquierdo, unidos entre sí por un istmo. Cubre parcialmente el cartílago tiroideo y la tráquea y su peso oscila entre los 20 y los 60 gramos.
En el tiroides encontramos dos tipos de células:
1) Células foliculares: producen la hormona tiroidea llamada tiroxina.
2) Células C parafoliculares: producen calcitonina que es otra hormona que interviene en la regulación del los niveles de calcio en sangre.
La función principal del tiroides es la producción de hormonas: tiroxina (T4) y triiodotironina (T3). Estas hormonas intervienen en numerosos procesos metabólicos.
En la infancia, juegan un papel importante en el crecimiento, desarrollo y maduración del organismo, el sistema nervioso central y el aparato reproductor.
Su ausencia produce en la infancia un retraso mental, sexual y orgánico que se conoce como cretinismo.
Por otro lado, el hipotiroidismo en el adulto se conoce como enfermedad de Gull y se caracteriza por: sequedad de piel y mucosas, piel áspera, sordera, estreñimiento, disminución de los reflejos, tendencia al sueño, disminución de las pulsaciones del corazón, intolerancia al frío, corazón grande, obesidad, etc.
Desgraciadamente, el tiroides es una fuente inagotable de problemas. Unas veces funciona poco y mal (hipotiroidismo) y otras veces funciona en exceso (hipertiroidismo). También puede inflamarse: tiroiditis. A menudo, crece de forma anormal dando lugar a bocios. Además, en el tiroides se pueden originar tumores, hasta el punto de ser el cáncer endocrino más frecuente.